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sábado, 25 de diciembre de 2010

Filosofía de la Historia

1.            ¿De qué modo puede la filosofía de la historia brindarnos una orientación interpretativa en torno a nuestra realidad?

La filosofía de la historia supone la crisis del proyecto filosófico de explicar toda la realidad desde un sistema universal; esa crisis empieza con el fracaso del último gran sistema filosófico de occidente, el de Hegel; en adelante no se habla de “filosofía” (a secas), sino de “filosofías de” (lenguaje, la existencia, la liberación, etc.).
La Ilustración (s. XVIII) puso límites a la especulación metafísica, pero nos hizo desconfiar del pasado y esclavizarnos al dominio de las ciencias de la naturaleza (bajo la idea de dominación); su “nosotros” (los ilustrados) niega a los otros y es totalitario (“nosotros somos los buenos”), la lectura de la historia es homogénea, con lagunas, excluye la diferencia, quiere eliminar el conflicto (la síntesis hegeliana), elimina la oposición (por ello Robespierre instaura el Régimen del Terror, que Maquiavelo avala para eliminar el Absolutismo). Nuestros abuelos no son “ilustrados”, añoran el pasado de respeto, valores, fe, libertad, etc.
Contra el racionalismo se levantan pensadores alemanes que rescatan el valor de la naturaleza, del sentimiento, de la lengua, del arte, de la trascendencia (surge el clasicismo); los historiadores no son los únicos autorizados para ocuparse de la historia, y el pensador sin paradojas es como el amante sin pasión, los filósofos modernos son doctos sin sentido estético. Logos (narración, historia) y poesía nacen del Mito, pero Occidente ha olvidado y despreciado la mitología.
La Reforma nos liberó del dominio del clero sobre el poder temporal, pero origina absolutismo: la propuesta teocrática de Calvino, donde el Estado pide cuentas al ciudadano (germen del capitalismo), la sociedad civil debe reemplazar la sociedad eclesial; del capitalismo nace el liberalismo (el Estado se limita a proteger, legislar y asegurar la convivencia ciudadana). Separa religión y ética: basta ser generoso con la Iglesia, no importa ser corrupto en el trabajo.
El Racionalismo de Descartes, Espinoza y Galileo promovió el método como clave de conocimiento, nos libró de la dictadura del dogmatismo de los maestros (“si lo dice Aristóteles…”), de los prejuicios, y afirmó que la verdad no es meta sino proceso; pero nos condujo al materialismo que se afirma en el positivismo. El Empirismo (Hume, Locke, Berkeley y Hobbes) nos dijo que aparte del conocimiento hay otras facultades como imaginación, voluntad, intuición, memoria, sensibilidad, sublimidad; el hombre es único capaz de romper la cadena de causas y efectos, la filosofía no puede ser sólo conocimiento, sino también antropología, ética, etc.
En su idealismo trascendental Kant Kant afirma que no es posible predecir el futuro porque el hombre es libre, pero se puede hablar de procesos, signos de progreso en la comunidad (la guerra es el mayor obstáculo moral). La historia de los pueblos es profética (devenir, progreso), moral (conciencia sobre acontecimientos), sutil (interpretable, no solo descriptible), política (se despliega en la sociedad), cosmopolita, y en clave de una constitución política republicana; la historia profética es la que permite al hombre conmoverse ante un acontecimiento, una revolución (en buen sentido), distinta a la historia efectual (enumeración de hechos de barbarie). En la historia hay dialéctica porque no todos los hombres buscan el bien, hay retrocesos y progresos; progreso es toma de conciencia dada la posibilidad de la memoria. Kant propone el cosmopolitismo o búsqueda de la confederación universal, con autonomía, soberanía y justicia como mecanismos de paz y progreso; una sociedad movida por una constitución escrita y que promueva la libertad, donde convivan voluntad y deber moral (siempre en tensión). El Estado es fundamento para la paz, es necesario para garantizar libertades, superación del estado de naturaleza, debe tener una Constitución escrita y la mejor forma es la República.
Johann Gottfried Herder (Prusia 1744- 1803) escribe “Ideas para la Filosofía de la Historia de la Humanidad”, donde repasa la historia de las culturas e impulsa el Stum und Drang (“Tormenta e impulso”) contra la Ilustración; el progreso desborda la historia humana, pero la aparición del hombre lo acelera, sobre todo a partir del lenguaje; el progreso humano no depende sólo de la exaltación de la razón abstracta, ni sigue una línea recta (contra la Ilustración); cada época y pueblo alcanza su máxima perfección y desde esto se les ha de juzgar, sin dividir la historia en estancos, sino verla como variación de la humanidad universal. La educación forma con conocimientos vitales y no solo nociones automáticas, también el ambiente natural es determinante (historia de las culturas), por ello destaca Grecia; la perfección es ético-religiosa (la totalidad humana, contra Kant) y estética (realización y armonía, la forma que expresa la divinidad) que no es un placer desinteresado y sin concepto, ni producto de facultades (contra Kant). La educación no debe centrarse en los clásicos, ni separar los conocimientos, sino ofrecer una formación integral.
Wilhelm von Humboldt (1767- 1835) afirma que el lenguaje es encarnación del pensamiento (naturalismo, no positivismo), es el carácter distintivo del pueblo alemán (lo cual desarrollan Nietzsche y otros); las generaciones pasan pero la lengua (sobre todo oral) permanece, ella genera comunidades (filosofía de la lengua, no del lenguaje (analítica). La historia no culmina ni se agota en la razón ilustrada, avanza en espiral, la infancia es Oriente, la adolescencia Egipto, la juventud Grecia y la madurez Roma. La Ilustración enfatiza en los individuos, saca a Dios de la historia, quiere entenderlo todo; hace falta más el discurso (alma, esencia, origen, Logos) que la comunicación. No todo lo que convoca a la comunidad es “santo”, si trae violencia: Hitler.
Los idealistas alemanes (Fichte, Schelling y Hegel) afirman el principio de conciencia (que procede de la voluntad), frente al principio de representación (que procede de una determinación, de una obligación): es distinto leer a Homero por obligación que leerlo por voluntad, por gusto; frente a educación moral, educación estética, sensible. Johann Gottlieb Fichte (1762- 1814), su nacionalismo se enmarca en la ocupación de Berlín por Napoleón, escribe “Discursos a la nación alemana” (1807), afirmando la superioridad filosófica y cultural de Alemania sobre las demás naciones europeas; Alemania necesita una nueva educación, que determine y forme las emociones e impulsos vitales, que la voluntad sea firme y decidida; la antigua educación exhortaba al buen orden y la moralidad, pero ha fracasado. Su idea nacionalista de identidad y amor por la Patria pasa a Landcaster y de éste a Simón Bolívar.
La historia se construye desde el “yo” libre, desde la identidad, desde la educación que más que repetición lo que da es motivación (quien no se educa no es alemán); se debe amar lo que se aprende, generar complacencia y luego desprenderse del tutor (en ello coinciden ilustrados e idealistas). La educación debe ofrecer criterios para la libertad, no dogmatismos (condicionamiento bajo deberes, reglas, normas a posteriori); con un carácter formado se puede discernir, y quien se educa y convence es capaz de educar a otros. Fichte rechaza los totalitarismos pero crea uno nuevo: o se es idealista y alemán, o no se es; de allí se pasa a enfatizar en lo biológico y se excluye a gitanos, polacos, judíos, rusos, etc.; ve la historia movida a partir del desenvolvimiento individual de sujetos protagonistas  de la historia (líderes), los demás hombres deben beber de éste ejemplo para desarrollar su personalidad y ser protagonistas también.
Schelling (Suabia 1775- 1856) en su Programa del Idealismo alemán (1795) propone una ética o sistema de todas las ideas o postulados prácticos, 1) la historia es referida a la creación, posibilidad del yo en el mundo y la libertad; el yo es capaz de auto reflexionar, de ir más allá de la identidad (cartesiana); el proceso es yo (hombre), no-yo (naturaleza, identidad, parte “dormida” de la conciencia, como en el budismo), y yo-absoluto; 2) el mundo es creado pero va cambiando; la nada es aquello que no es fenómeno, el romanticismo parte de la novedad en sí, no del fenómeno; lo no fenoménico no es causa. En las Edades del mundo aborda la filosofía de la historia, busca encontrar el Todo en la historia. El pasado se sabe, se narra, el presente se conoce, se expone y el futuro se presiente, se conjetura; cada presente es original, y se vive desde y “contra” el pasado. Mal, sufrimiento y muerte no son asumidos como algo venido de fuera, nacen del corazón como dijo Jesús; rechaza la separación entre ética y religión (contra Ockam que dijo: “No podemos verificar que lo bueno que hacemos agrada a Dios”). Los místicos viven esa dinámica de una voluntad libre de deseos, esa Nada que es a la vez Todo, es eternidad incondicionada: “No me importa si no resucito, porque siempre he vivido como resucitado” (Marcel).
Whilhelm Friedrich Hegel (1770-1813) responde de modo racional a su contexto socio-cultural, se necesitaba la libertad, Alemania estaba destrozada por la Guerra de los 30 años, el campesinado empobrecido, la cultura decaída, la clase media era escasa y la política ineficaz. Hegel tenía el ideal de la Polis griega, la armonía del hombre y la ciudad; el espíritu del pueblo da plenitud al individuo, pero puede quedarse en la formalidad: pocos llegan a ser libres; el cristianismo aporta la noción de subjetividad, pero no apoya la noción de ciudadanía. El parentesco es el vínculo con la familia, la libertad es el vínculo con el Estado. El tiempo tiene continuidad homogénea, como un río que es el espíritu Absoluto, la historia tiene un alma, una Idea, y el historiador la lee haciendo cortes; nuestra experiencia nos hace ver un presente, un pasado y un futuro; el Estado es determinante, y a él se amolda la sociedad civil como lo corrobora la realidad. El espíritu del pueblo se va forjando en la educación que concientice, que universalice, que domine su naturaleza; las instituciones del pueblo deben ofrecer libertad al individuo, y cuando ese pueblo madura empieza a decaer (por la costumbre) para dar paso a otro(s) pueblo(s). Ninguna fuerza puede destruir el espíritu del pueblo, sino que pone en evidencia su caducidad.
En Karl Marx (1818- 1883) la dialéctica kantiana se reinterpreta, no hay absolutización de cualquier ideología particular (puede absolutizarse la idea de Estado, Ley, religión, etc.); en Marx se hace necesario un nuevo humanismo con el principio material que es el trabajo (lucha dialéctica de las necesidades del hombre frente a la naturaleza), siendo el hombre pobre, carente, inseguro (carece de garras, cuero, etc.), debe usar su razón, su capacidad técnica para sobrevivir, no sólo para dominar; la naturaleza es fuerte, exige proceso, trabajo, tiene leyes (épocas de siembra, calidad, cantidad, etc.), una lucha permanente. Ese humanismo se halla enfrentado al anti humanismo (alienación o enajenación, proceso de pérdida de identidad); el hombre se haya inserto en la comunidad, en el mundo de las relaciones económicas (más que sociales o políticas), una relación hombre-hombre (no hombre-naturaleza) en la que el poder provoca inequidad, violencia, división cultural en clases, desarrollo de la propiedad privada (en ello tienen parte la Iglesia y el Estado, macroestructuras que afectan a la micro estructura económica).
El capitalismo pone el poder en manos de los amos, y hace del trabajo algo exterior, deshumanizante, arruina el espíritu; el hombre no puede verse aislado, “singular”, sino en sus relaciones económicas, en su clase y en su regulación por el Estado; la religión suaviza, hace pasivo y fatalista al hombre, no mueve su voluntad. La historia tiene cortes o etapas, hay una negación del estadio anterior (Hegel), pero se lee desde el materialismo en vez de negarlo, la economía determina al Estado (superestructura en Hegel, infraestructura en Marx): tribus, comunas, polis, feudos, burgos. Las estructuras económicas tienen autonomía (como etapas en una biografía) y su tiempo más allá de lo cronológico, entra lo contingente, no se enmarca la historia en fechas, y entran las pequeñas historias (el campesino arruinado por el neoliberalismo, el comerciante que ha crecido, el estudiante que no ve cambios, etc.).
Teoría crítica de la sociedad (Marcuse, Horkheimer, Adorno, Husserl). Escuela de Frankfurt. Frente a la ideología superestructural se halla la criticidad y la conciencia; la lucha no es sólo por el control de los medios de producción, sino también en el discurso, en la legitimación al contar la historia; bajo los paradigmas conceptuales no sólo se domina el presente, sino también el porvenir. La historia se cuenta desde el poder, desde Marx no se mira sólo lo que se cuenta sino cómo se cuenta, esa historia necesita redimirse con una nueva conciencia más que con armas (Benjamin); se debe  llevar a una crítica social con alternativas de resistencia o emancipación desde dentro del sistema (Marx no alcanzó esta etapa).
Adorno y Horkheimer crean la dialéctica negativa, la resistencia de la teoría crítica frente a la instrumentalización de la razón; rechazan crear ideologías y buscan deconstruir, una crítica a la cara oculta de lo “virtuoso” en Occidente y su doble moral. El saber se monopoliza, se rechaza la discusión, no se advierte el silencio cómplice; se oculta lo negativo, se rechaza lo crítico, el error, la discusión. Suponemos que la historia siempre va en superación (porque es contada desde los vencedores). El filósofo mira que la verdad es construcción, por ello no debe casarse con un sistema, debe leer la realidad; el pensamiento no puede estancarse ni quedarse en dogmas, el hombre es inobjetivable; el lenguaje es instrumento imaginario, puede usarse en la propaganda de modo ambiguo y puede manipular masas.
El hombre avanza por el trabajo pero también por las relaciones, circunstancias; hay permisión y prohibición, ruptura permanente de paradigmas, de posiciones seguras; a pesar de las ficciones sociales, todos somos iguales; la maquinaria humana produce crecimiento económico-político pero decrecimiento humano. Voltaire mira la razón como unilateral, sólo lo negativo del progreso, pero la razón también sirve para la denuncia, la justicia y la crítica, además la injusticia sólo puede venir desde el poder, sólo el juez puede ser injusto, y sólo es verdadero el pensamiento que lucha por lo justo; el nacionalismo extremo muestra la injusticia del poder en la II Guerra Mundial, unido a la imagen del super hombre que propiciaron los artistas “futuristas” exaltando lo patético. La propaganda ha hecho del cuerpo el centro, une egocentrismo y belleza, la mujer es domesticada, los cosméticos –antes reservados a las prostitutas- se han hecho universales, la vulgar se hace moda y el lujo se pregona como libertad, como sublima; ricos y poderosos son amparados por la ley. El hombre usa cada vez menos su razón porque destruye a los que lo rodean, desde la religión, la política y la cultura. 
La teoría crítica se sirve del discurso de legitimación para marcar los linderos de una reconstrucción social con fuertes raíces críticas. El problema de la condición indirecta y sutil del poder ejercido en la civilización encuentra en Marcuse un aporte argumentativo desde el avance del capitalismo y la industrialización y sus consecuencias de dominio de la naturaleza humana, y su exógena forma de racionalidad; en “El hombre unidimensional” (1964) Marcuse critica la “sociedad cerrada” producto del capitalismo americano, pero incorpora en sí toda dimensión de la existencia, sea privada o pública; asimila todo lo que se le opone, y mueve y maneja todos los instintos humanos (“incluso lo antisocial”); la democracia supera al absolutismo en el manejo de conflictos, los administra y los hace “productivos” y destructivos. La ciudad con todo su progreso es el símbolo del capitalismo, junto a la expansión económica, política y militar. La filosofía se limita a la modestia, “deja intacta la realidad establecida; aborrece las transgresiones”, como hacen Austin y Wittgenstein, se difama lo alternativo y lo elaborado, se renuncia a toda teoría, se apela a la camaradería, el lenguaje común de la calle; pero ese lenguaje sólo expresa al hombre y a la naturaleza mutilados, se analiza su lenguaje por fragmentos, se hace con exactitud y claridad, pero sin aludir a su universo; se busca el orden en las palabras pero no la transformación de la realidad, se hace cómplice de la sociedad que manda, sólo puede describirse pero no explicarse.
Pragmatismo universalista (Habermas, Heidegger). Jürgen Habermas critica incluso la sociedad marxista y el capitalismo, destaca al individuo y su psicología, se ocupa de la acción comunicativa, la política y otros aspectos sociales; critica la legitimación que se da el poder capitalista, la economía sustenta en el Estado policial, las leyes que favorecen el mercado así como el discurso y la propaganda (abriendo la brecha entre lo legal y lo ético). Para Habermas la emancipación es un criterio para validar una razón capaz de superar los antagonismos entre el instrumentalismo y la reflexión crítica. Moderno no viene de “moda” sino de “modo” de ser; se impone la moda con la censura social “eso no está de moda”. La gente participa del tren de la historia de la mano de cada presente, de cada moda, como en una obra impresionista (arte desde lejos, siendo manchas), como la fotografía y el cine; el arte (eterno) se reduce a moda, se hace inmanente, se “encarna”, la idea se temporiza. 
Vivimos la época de la profanación, no de la sacralización; hay secularismo, urbanización, politización, teleologización, dominación del tiempo; parece que toda incertidumbre se puede controlar con orden, planificación: seguros médicos, hospitales psiquiátricos, tarjetas de crédito, bases de datos, ancianatos, etc. El triunfo del capitalismo es que absorbe a sus opositores, porque puede convertir todo en negocio: lo presenta en TV, lo convierte en libro, lo somete a las multinacionales, etc. La naturaleza es vista como objeto pero subjetivamente, no como algo contemplado con el espíritu; “las ciencias de hecho producen hombres de hecho” (Habermas).
Para Habermas el animal empieza a ser humano en el momento en que habla, empieza su historia con conciencia y voluntad libre; la acción comunicativa, atacada por el poder y el capitalismo, entra en decadencia cuando no se abre a los otros (p. e la lengua catalana frente al inglés); la racionalidad y la comunicación no pueden desligarse de la historia, condición necesaria de la internacionalización (contrario a la globalización); el nazismo fue un nacionalismo mediocre, quedado en naturalismo (racismo), en opresión del individuo y los otros, impidió la emancipación. El lenguaje opresor es un discurso manipulador, excluyente, que ataca a los débiles, oculta la “rechazable”; pero para Habermas el lenguaje racional y comunicativo sirve a la emancipación, la conciencia libre, es posible en el arte, la poesía, el canto popular.
Husserl mira la necesidad de considerar un orden nuevo, una nueva época de la humanidad, donde la vida sea creadora de cultura, en unidad, histórica, desde las ciencias del espíritu, sin quedarse en naturalismo; pero no se debe despreciar la corporeidad, pues la Physis humana es el sustento de la espiritualidad; así mismo la naturaleza es el medio circundante de la realidad natural, la cosmovisión, no sólo lo biológico. La gran preocupación de Husserl es caracterizar espiritualmente la “Europa”, entendida como “unidad de un vivir, obrar, crear espirituales: con todos los fines, intereses, preocupaciones y esfuerzos, con los objetivos, las instituciones, las organizaciones”; busca los fines propios de la Europa distinta y unida, “a partir de ideas de la razón”, pues de ella nace la cultura, y de esta filosofía y ciencia. Husserl es logocéntrico, Derridá le critica que equipara Occidente, razón, Europa, idea, y que su propuesta no puede encarnarse, marca una sola línea, un predominio de la idea racional en toda época; en Husserl la historia es el aparecer del fenómeno, pero descrito, no interpretado; Husserl, Fichte y Schelling buscan la unidad, no alemana sino europea, pero desconociendo la particularidad.
Martin Heidegger (1889- 1976): El ser se desenvuelve en el tiempo, su horizonte de posibilidad, porque el humano va cambiando en el tiempo, pero su esencia es el existir; Occidente piensa desde el ente, la metafísica, la filosofía del ocaso (ambigüedad), poco piensa la existencia, el presente (Nietzsche, Dilthey, nihilismo); nihilismo en pensarnos nosotros mismos, desnudos ante la inminencia de la muerte. Los grandes proyectos de certeza han fracasado, hay desencanto, ocaso, no hay seguridades a qué aferrarse; ya no están los grandes dioses (Hölderlin): Dionisos (dios desterrado del Olimpo, y tardío), Heracles (semidios) y Jesús (Dios encarnado) y sólo se han dado cuenta los poetas, que no está sumidos en la ocupación, viven el propio tiempo (no son metafísicos); los poetas (Hölderling, Baudelaire, Casaldáliga) son verdaderos historiadores porque rescaten el ser, cantan una canción de duelo y hacen una plegaria al Dios ausente. Occidente ha levantado edificios conceptuales y ha dado al ser por obvio, ya no hay preguntas, todo se cosifica.
Mesianismo. Walter Benjamin destaca por sus 18 tesis sobre filosofía de la historia (1959). En Benjamin el Mesías es una fuerza y no una persona, es cosmovisión e interpretación de la historia, la necesidad de instaurar un orden nuevo; todo presente tiene una cita secreta con el pasado, con los gritos de las víctimas que nadie quiso escuchar, y que esperan justicia en nuestro presente (redención); la lucha revolucionaria no es sólo política (materialismo), sino también espiritual (lo materno, las tradiciones); como asume la dialéctica y no el historicismo, su hermenéutica siempre es abierta, nada es insignificantes, todo debe reinterpretarse.
Justicia es dar lo suyo a los vencidos, devolvérselo a quienes luchan, en el ahora de la emancipación; lo importante no es el progreso, sino el proceso. Benjamin dijo que la generación europea de 1914 a 1918 atravesó una de las experiencias más atroces, pero la gente volvía muda de los campos de batalla, pobres en vez de enriquecidas o enriquecedores; y de pronto todo cambió en lo tecnológico, se desarrolló la técnica y se empobreció la experiencia, la prueba fue el florecer de la astrología, el yoga, las sectas, vegetarianismo, gnosis, escolástica y espiritismo; la literatura también mostró su pobreza, pese a la abundancia, una nueva barbarie en la que los pensadores se reducían a un campo, se desprecia el pasado y se mira sólo lo técnico, lo modificable (no se describe), lo propio (no la humanidad completa); el vidrio ha atacado al misterio y la posesión, muestra la pobreza burguesa de modo frío y soberbio; no se quieren nuevas experiencias, se está cansado, con sueño, sin vigilancia, no se quieren complicaciones, se prefiere deleitarse en Mickey mouse.
¿CIRCULAR O LINEAL?
BIBLIOGRAFÍA
Apuntes de clase, asesora: María Consuelo Escobar (2008).
BENJAMIN, Walter. “Tesis de filosofía de la historia”, en Discursos Interrumpidos I, Madrid, Taurus, 1986.
HEIDEGGER, M., Schelling y la libertad humana, Caracas, Monte Ávila, 1985.
HUSSERL, “La filosofía en la crisis de la humanidad europea”, 1935.
KANT, Inmanuel. Idea para una historia universal en sentido cosmopolita y otros escritos sobre Filosofía de la Historia, Madrid, Tecnos, 1987.
            -La paz perpetua. 1795.
MARX, Karl y ENGELS, Friedrich. Manifiesto comunista. 1845.

jueves, 23 de diciembre de 2010

Antropología Filosófica


La Antropología Filosófica es una respuesta al problema del hombre. Que surge en el siglo V a.C, que es identificado con el periodo antropológico de la filosofía, se quiere tratar sobre el problema: ¿Quién es el Hombre? El hombre ha manejado esta inquietud muy natural, el hombre es insatisfecho, acerca de su propia realidad, sobre sí mismo.
LA ANTROPOLOGÍA FILOSÓFICA COMO TERMINO

 (Del griego άνθρωπος, ánthropos, "hombre", y λόγος, logos, "razonamiento" o "discurso"), es una escuela de pensamiento fundada en Alemania en los años 1920 y 1930, de filósofos, antropólogos y sociólogos; este movimiento tuvo una influencia decisiva en el panorama intelectual alemán del siglo XX.
La base de su planteamiento consistía en utilizar las enseñanzas de las ciencias naturales (biología, zoología, etología, paleoantropología, etc.) y las ciencias humanas para tratar de identificar las características de la especie humana, su posición específica en el mundo en el entorno del reino mineral, vegetal y animal.
Sus principales representantes son Max Scheler (1874-1928), Helmuth Plessner (1892-1985) y Arnold Gehlen (1904-1976).
También, cerca de esta corriente, destacan: Gotthard Günther (1900-1984), Helmut Schelsky, Erich Rothacker, Peter Sloterdijk y Karol Wojtyla.
Las diferentes culturas han dado un concepto de lo que es el hombre, vamos a darle una mirada:
El Hombre es un Misterio: Por su complejidad este misterio no puede agotarse con la luz de la razón.
Para el Chino: Ha tratado de centrar o mirar el hombre como centro del gobierno, de la religión y del ente. El hombre es considerado amor.
Para el Hindú: El hombre es considerado un caminante. Jainismo 3 caminos: Conocimiento, Devoción, Acción.
Para el Griego: Hay varios planteamientos sobre el hombre, en un principio el hombre es considerado como una parte del cosmos. Platón dice que el alma es la esencia y el cuerpo la cárcel. Aristóteles dice que el hombre es una unidad sensorial Cuerpo y Alma, para el pensamiento cristiano patrístico y medieval el hombre es un ser creado a imagen divina, persona libre, con voluntad, libertad y amor.
Santo Tomás dice: que el alma espiritual es principio interno que conforma el cuerpo. Para el renacimiento humanista el hombre es el centro del universo. Para el pensamiento moderno da primacía al sujeto pensante, centro del orden objetivo. En el pensamiento contemporáneo se conjugan varias tendencias:
El Materialismo: El hombre es sólo materia pero mejor organizada sujeto a las leyes de los seres naturales.
Evolucionismo: El hombre se explica al igual que todos los demás seres desde la variedad de especies por adaptación al ambiente o selección natural.
Existencialismo: Capta la profundidad del hombre como ser contradictorio, enigma o paradoja.
Personalismo: Considera el hombre como un ser en el mundo, la persona es singular, irrepetible, libre, responsable, el hombre es un ser histórico.
Fenomenología y Ontología: Max Sheller: la singularidad del ser espiritual, el hombre se abre al mundo en cuanto a su ser espiritual.
Karol Wojtyla: El hombre es un ser para el otro, ésta inmerso en una sociedad, de la cual hace parte, ésta llamado a vivir para los demás, y a entregar su vida al servicio del otro, despojándose de sí mismo y haciendo parte del otro.
Estos son intentos de respuesta a los más grandes interrogantes que el hombre se ha hecho, cada época, ya que él mismo quiere encontrar sur respuesta como hombre.
Antropología Filosófica intento de respuesta: La Antropología Filosófica de entrada la definió como ciencia del hombre, pero del hombre considerado en su sentido de misterio, en su globalidad. La Antropología Filosófica busca exponer sistemáticamente lo que conoce del hombre y la respuesta que podemos dar.
¿Quién es el hombre?
La Antropología Filosófica es la filosofía del hombre porque es ciencia que nos muestra las causas o principios con los que se hace inteligible el ser que llamamos hombre.
1. COTIDIANIDAD
Es el diario acontecer, es la que se va haciendo rutina, la vida diaria. La pregunta sobre el hombre se ve opacada en la cotidianidad.
Aspectos de la cotidianidad:
De entrada toda existencia humana se ve enfrentada al reto de la supervivencia, responder a esta necesidad es una tendencia vital, se impone; pero el problema es que las personas se quedan en la supervivencia.
Dinamismo Social: Todos experimentamos en el transcurrir diario que estamos condicionados por aspectos materiales e históricos. Todo ser humano nace al interior de una red de relaciones. Con nosotros no empieza la historia, la sociedad.
¿Y por qué sucede todo esto? Por la naturaleza social de todo ser humano, estoy involucrado en una determinada historia y situación.
La cotidianidad que es respuesta al diario acontecer, me puede llevar a perder el sentido de la admiración: Se establece una relación con la naturaleza y el entorno, la relación en la que estoy inmerso está llena de valores pero a veces no me doy cuenta de lo que me rodea.
La pregunta por el ser del hombre.
2. EL PROCESO DE DESHUMANIZACION
En esta pregunta por el hombre tenemos que ser conscientes que el único ser que puede negar su humanidad es el hombre. El proceso de degradación del hombre no es el animal sino su deshumanidad. Tenemos que identificar la deshumanización y las situaciones límite.
El mismo hombre es el que propicia el proceso de deshumanización. En este momento existen grandes desequilibrios de orden económico, social. El progreso técnico y científico aumenta, aumentan las amenazas de desnutrición. ¿El hombre tiene que manejar una conciencia crítica, tales son las manifestaciones o síntomas es otro proceso de deshumanización actual?
Masificación: Se origina en el paso del feudalismo a la industrialización.
¿Por qué? En el feudalismo la economía es muy familiar. Con la industrialización empiezan las empresas, el trabajador tiene que llegar al centro, ya es una multitud de familias desplazadas en busca de un trabajo. La masificación es el hombre anónimo considerado en masa. El aislamiento creciente del hombre.
La manifestación lleva a perder la individualidad mediante una cultura estandarizada hecha para multitudes.
La Cosificación: El hombre deja de ser él mismo, humano, persona; para a ser un simple medio e instrumento, y así se produce el fenómeno de la alienación o enajenación (Sacado de sí mismo, en manos de otro, ponerlo a nivel o categoría de las cosas) se da en el plano de todas las relaciones humanas. Veamos por partes:
Relaciones de trabajo: El trabajador es un instrumento que sirve en la manera en que produce, y es objeto de ganancia, se le califica. Además de esto, sus condiciones de vida están sometidas a la plusvalía.
Se cosifica el trabajador, de una competencia entre sí, los mecanismos de ascenso, las tácticas de presión y chantaje, crean una atmósfera cotidiana de servilismo. Hay condiciones de trabajo que convierten al hombre en un medio, que terminan esclavizándolo estas condiciones.
Proceso de Cosificación en las relaciones humanas: Los intereses sociales y económicos se mezclan con los sentimientos y los afectos.
Esto lleva a constituir una compleja red de apariencias donde predominan: la ostentación, el poder. La relación está mediatizada por el interés y la utilidad, el otro es un medio para el negocio y la influencia. Se valora a los otros en función de su dinero y poderío social, lo que lleva a implantar un sentido de antivalores:
Actitud Maquiavélica: El fin justifica a los medios.
La Hipocresía: La apariencia: importa dar la sensación de algo distinto, ganarme el otro.
La Mediocridad: El hombre vive de lo que se vive, de la conveniencia.
La Opresión: Este fenómeno se vive particularmente en América Latina y su primera y fundamental razón es la angustia vital producida por el hombre: analfabetismo, insalubridad, desnutrición, desempleo. Luego aparece la negación sistemática y colectiva del hombre, esto expresado en las dictaduras de corte fascista. La injusticia social, la explotación del hombre por el hombre, la brecha entre ricos y pobres cada días es más grande, honda y profunda.
La violación sistemática de los derechos humanos de donde sea, sistemas sociales, políticos, que violan fragante la dignidad de la persona humana.
3. EL HOMBRE SER PARADOJICO Y COMPLEJO
La paradoja es una aparente contradicción, hablando del hombre nosotros experimentamos en nosotros mismos y vemos en los otros una ambiguedad, vivimos momentos de entusiasmos, satisfacciones íntimas, etc., al momento sentimos todo lo contrario, ira, ofuscación, la vida sin sentido. Sus deseos son de trascendencia pero sujeto a lo presente a lo inmediato. El hombre es un ser capaz de lo mejor y de lo peor.
Pascal dice que: “el hombre es una mezcla de ángel y de bestia., racional e irracional, materia y espíritu, libertad y esclavitud, ser y nada”. La complejidad hace referencia a que el ser humano está configurado a multitudes dimensiones pero ésta ha de vivirlo a la unidad de su ser, integridad de su persona.
A través de la historia la filosofía ha tratado de definir al hombre como tal, pero es complejo definir al hombre, la Antropología Filosófica ha ido penetrando al hombre y ha descubierto que no es tan fácil definir al hombre.
Dimensiones del hombre:
Biológica: Inserción en el mundo a través de la biológica y éste tiene algunos aspectos: Comer, vestido, habitación etc.
Espiritual: Desarrollo y fomento de nuestra interioridad.
Social: El hombre es un ser capacitado para entrar en relación con los otros, y consigo mismo.
Racional: El ser humano está dotado de unas capacidades intelectivas, piensa, estudia, profundiza, analiza, etc.
Psicológica: Afectividad, instintos, emotividad.
El ser humano para hacerse tiene que atender armónicamente a sus dimensiones. Permitirle al hombre un desarrollo orgánico de su ser.
4. DIMENSIONES POR LA PREGUNTA DEL HOMBRE
La Antropología Filosófica tiene como objetivo buscar una respuesta globalizante sobre el hombre, su ser y su actuar. Al meternos a dar una respuesta por el hombre en diferentes interrogantes: ¿De dónde viene el hombre? ¿En qué consiste este pasado del hombre en cuanto materia? y para dar respuesta a este interrogante, la arqueología, la paleontología, la etnología y la embriología, aportan una serie de datos científicos.
Hay que considerar que el origen del hombre hay tres niveles de evolución:
El origen y desarrollo del cosmos.
El origen y desarrollo de la vida.
El origen y desarrollo de la conciencia.
No basta la pregunta por el origen físico del hombre. También hay que preguntar por el origen metafísico del hombre, o sea, su fundamento, la razón de ser de su existencia.
El hombre es un ser que no puede vivir son los demás, pero es un ser que no quisiera vivir sin los demás. La pregunta por el hombre es también una pregunta por los otros. ¿Tiene o no sentido la vida? ¿Hacia dónde vamos? ¿Hay alguna finalidad que justifique? ¿Vale la pena luchar por algo? ¿Vale la pena vivir para que todo termine con la muerte?.
Todo esto son cuestiones vitales, atañen al hombre a su ser y a su quehacer, problema que no puedo satisfacerme, sino que debo asumir. Estas preguntas me involucran totalmente, si al preguntarme por el hombre no me siento afectado totalmente no le puedo tener sentido a la vida.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Metafísica

1.    ¿Qué es y cuáles son sus características?


Orígenes de la Metafísica
Hemos visto que con Parménides apareció por vez primera el pensamiento del ser. Parménides se contenta con decir, tautológicamente, que este ser es, sin más, añadiendo, simplemente, que el no-ser no es.


La aparición del término metafísica es bastante tardía. Aunque data del siglo XII, el término se hizo susceptible de ser pensado en el siglo I a. C., cuando Andrónico de Rodas décimo Escolarca del Liceo (escuelaperipatética  fundada por Aristóteles) tuvo que ordenar los manuscritos reencontrados, ordenándolos y clasificándolos según secciones específicas, que correspondían al currículum de una enseñanza doctrinal. Inspirándose en la división estoica de la filosofía en lógica, física y ética, Andrónico reunió los manuscritos de Aristóteles (corpus aristotelicum), en cuatro grandes clases:
·         Los escritos lógicos (que más tarde recibirán el nombre de Organon)
·         Los escritos éticos, políticos, retóricos (que comprenden también la Poética)
·         Los escritos físicos (donde hay también investigaciones que hoy clasificaríamos como biológicas o psicológicas)
·         Los escritos metafísicos (no pareciéndole muy claro el objeto de los tratados de la filosofía primera, los colocó, para salir del paso, después de los libros de física (tá metá tá physiká) este rótulo, en forma abreviada y sustantiva, paso a ser el nombre oficial y propio de este saber primero y fundamental)
Andrónico habría clasificado bajo la apelación de metafísica un conjunto desigual de catorce opúsculos que no supo clasificar de otra manera.


De lo que trata la metafísica:
La metafísica designará para nosotros la corriente de fondo del pensamiento occidental, que parte de los griegos y llega hasta nosotros, se pregunta por lo que es y, por tanto, por el ser y sus causas. Ignorado por completo el término de metafísica, Aristóteles le dio a esta materia el nombre de filosofía primera no sólo porque a ella concernía el primero de todos los objetos, el ser, sino también, e incluso sobre todo, porque hablar del ser era también preguntarse por el principio de todo lo que es. Después, toda filosofía que se precia de serlo se define por una tesis del ser y su fundamento, y sólo puede ser filosofía en la medida en que lo hace.


Características:
La filosofía primera o metafísica al ocuparse del ser en cuanto ser, es decir, el ser de las cosas, de sus determinaciones, principios, se ocupa de algo superior o supremo, que se puede entender de dos modos:
El ente, en cuyo caso la metafísica será lo que se llamará  ontología.
La metafísica se convierte en una investigación de las sustancias.


Como estudio formal de lo que luego se llamarán formalidades. Algo, en tanto que es, recibe el nombre de ente, en cuyo caso la metafísica será lo que se llamará  ontología.
A continuación de la anterior explicación, Aristóteles nos dice que la palabra ser se dice de muchas maneras, pero que todos estos sentidos se refieren a una sola cosa. Esta cosa de la que se predica el ser en sentido primario es la sustancia (ousía) el ente en sí y de por sí, del cual dependen los accidentes. La pregunta de lo que es el ente, se reduce a otra: ¿qué es la sustancia? La metafísica se convierte en una investigación de las sustancias. Y es que el mundo entero está, para Aristóteles, sostenido sobre entes que reposan en sí o sustancias. Entre las sustancias hay una que es la más noble y suficiente de todas, el THEOS, que como objeto de deseo o amor, mueve a todas sin ser ella movida. Siendo esto así, la teoría de la sustancia debe culminar en una investigación sobre Dios, teología.  


¿Cuáles son los temas constitutivos de la teoría sobre el ser?


El concepto de ser, que ha ocupado un lugar central en el pensamiento de muchos filósofos, tiene muy diversos aspectos, entre otras razones por los modos como se ha expresado lingüísticamente. Los griegos usaron la sustantivación verbal tó óv literalmente el siendo, el que es. Desde muy temprano se planteó la cuestión de si hay que entender ser, en el llamado sentido existencial.  Este concepto está por lo menos implícito en el primitivo preguntar griego ¿qué es el ser? Y que se podría traducir ¿quién es el ser?, ¿cuál es la cosa que propiamente es? es el problema de Parménides dilucidado a fondo por Platón y luego por Aristóteles, quien orientó el problema distinguiendo lo cosmológico (distancia de los presocráticos) y lo lógico, del punto de vista metafísico, que trata al ser como ser.


EL SER es el acto primero, fundante de todos los demás seres que son maneras de ser


Propiedades fundamentales del ser


El ser es el máximo trascendental, lo que digamos del ser se dice de todos los seres. Lo que se dice de la razón, se dice de todas las racionalidades. El ser, simplemente es y no más. No se puede entrar en la definición, es limitado, indefinible.


Principios del ser: "El ser es, el no-ser no es".


Características del ser: El ser no tiene principio, porque ¿de qué podría ser creado? ¿de un no-ser? pero el no-ser no existe. Por esta misma razón el ser tampoco puede tener fin, es eterno. Luego, el ser es continuo, porque cualquier intervalo sería no-ser. Es el ser es también inmóvil e inmutable porque, en el caso contrario, tendría que transformarse en no-ser. El ser es indivisible, porque si existiesen sus partes, éstas por no ser "ser" tendrían que ser "no-ser". Finalmente el ser es fijo y único: supongamos que nos encontramos en una playa, y vemos el mar, la arena, percibimos el aire; cada uno de estos elementos como algo distinto. Pero si eso fuese real, ¿qué sería aquel elemento que separa el agua del aire, y la arena de los dos y de cada uno de ellos? Este elemento, ¿es un ser o es un no-ser? Suponiendo que es un ser, la situación sería absurda, porque éste a la vez tendría que tener otras fronteras - elementos que lo separasen del mismo, y así, aparecerían más y más elementos - fronteras sin fin. Pero, por otro lado, si este elemento es un no-ser, como es lógico, no existe, ya que sólo "el ser es, y el no-ser no es". Así que algo que no existe, no puede separar una cosa de otra, luego, no existe la pluralidad de las cosas sino un único ser.


El ser se puede predicar:
Unívocamente: el ser se predica de sus inferiores por razones completamente iguales o de igual manera
Equívocamente: cuando se predica por razones totalmente diferentes 
Analógicamente: cuando se predica por razones en parte igual y en parte distinta




¿Cuál es la estructura del ente?


Definición del ente y sus “principios constitutivos”. º Ser - Esencia


Ente → lo que tiene ser.
Ser → acto primero de la esencia; existencia: primer perfección.
Esencia → aquello por lo que una cosa es lo que es.




SUSTANCIA - ACCIDENTES


Substancia: aquello cuya esencia corresponde ser en sí y por sí (subsiste = posee un ser propio).
Accidentes: aquello cuya esencia corresponde ser en otro. Por ejemplo, el color de la flor es rojo, la flor por cambiar su color no dejará de ser flor.
El accidente en dicho caso es el color, pues subsiste dentro de la substancia, la cual sería la flor. Substancia y accidentes son realmente distintos.

Substancia: lo que es en sí, los accidentes la modifican perfeccionando a un único ente.
Accidentes: dependen del ser de la substancia.


º Substancia - Accidentes


Substancia → aquello cuya esencia corresponde ser en sí y por sí.
(lo que subsiste por sí mismo) Aristóteles distingue dos tipos de substancias:
1.Substancias primeras: el individuo concreto (ej: Sócrates)
2.Substancias segundas: la especie y el género (ej: hombre, animal)


Accidente → aquello cuya esencia corresponde ser en otro.
(lo que subsiste en otro)


Definición de los modos de ser (o predicamentos)


SUBSTANCIA         
Hombre
Memo


ACCIDENTES         
bueno (cualidad)
alto (cantidad)
hijo de Martín (relación)
en la oficina (donde)
parado (posición)
tiene muchos libros (posesión)
hoy llegó a trabajar (cuándo)
escribiendo (acción)
tiene calor (pasión)


Aspectos que afectan a los predicamentos: º Acto º Potencia º Ser en devenir
Acto y potencia
La teoría de la potencia y el acto, generalización de la teoría hilemórfica, es la explicación última del devenir de la substancia. Parménides, al operar únicamente con los conceptos "ser" y "no ser" había deducido la unicidad y la inmovilidad del ser (monismo estático). Platón, habría intentado superar este planteo admitiendo la realidad de una suerte de forma de "no ser": la alteridad. Aristóteles resuelve la paradoja añadiendo otra forma real de no ser: la potencia. Y mediante este concepto, explica el devenir de la substancia.


En todo ser hay "lo que ya es" y es el acto y su "poder llegar a ser" que es la potencia. Indica además que no es posible dar una definición estricta de estos términos, sino que hay que conformarse con ejemplos y analogías. Así el acto y la potencia están en la misma relación que la plata y el germen o el ver y el tener los ojos cerrados (cuando se posee la capacidad de ver).


La potencia (dynamis)
Aristóteles distingue entre:
1. Potencia activa: o el poder o facultad de producir una acción o un efecto.
2. Potencia pasiva: o posibilidad de pasar de un estado a otro o de recibir la acción de una potencia activa. La potencia activa se encuentra en el agente y la pasiva en el que experimenta la acción. De esta forma, ejemplifica, el fuego tiene el poder de quemar y lo graso la posibilidad de ser engrasado.


El acto (enérgeia y enteléchia)
El vocablo enérgeia deriva de érgon que significa acción, obra. Y el vocablo enteléchia de télos (fin) y échein (poseer), ha sido traducido como perfeccionamiento.
Energía es, pues, la acción del que posee la potencia activa.
Enteléchia es el perfeccionamiento, la forma en que se acaba o completa lo que ya estaba en la potencia pasiva. Por ejemplo el "ser" un árbol de una semilla.
"La potencia es algo real en el ser, y también algo distinto del acto"


Potencia: Capacidad de recibir o producir un acto.
Supone una privación (carencia de una perfección posible)
Ej: el niño es potencialmente una persona adulta, mientras que el gato no lo es.   


Acto: Perfección que un sujeto posee.
El movimiento es un “acto en flujo”, un proceso de actualización (acto restringido).


·         1.) La potencia es distinta del acto.
·         2.) Acto y potencia no son realidades completas, sino aspectos o principios que se encuentran en las cosas.
·         3.) La potencia se contrapone al acto como lo imperfecto a lo perfecto.
·         4.) El acto es anterior a la potencia.
·         5.) La potencia pasiva es el acto primero, mientras que la potencia activa es el acto segundo.

La forma
La forma es la escencia de la cosa, la substancia segunda, la especie y es eterna. Aunque ésta no puede existir fuera de la materia. Todo lo que deviene debe poseer también materia, la cual recibe esa forma, como sujeto último de la misma.


La materia
Aristóteles distingue entre:
1. Materia próxima (escháte hyle) que es, por ejemplo, el bronce o la carne y los huesos.
2. Materia primera (próte hyle) que es algo indeterminado carente de forma, cualidades o extensión e incapaz de existir independientemente.
Lo que deviene o se engendra es el individuo concreto, el compuesto de materia y forma. Materia y forma son eternas pero no pueden existir independientemente sino tan solo como el compuesto de ambas.


Prioridad formal
Aristóteles confiere prioridad a la forma puesto que para él esta es al mismo tiempo:
1. Esencia de cada cosa
2. Naturaleza (o el "Principio" inmanenete de actividad)
Por otra parte, solo la forma es definible y cognoscible. Y es común a toda la especie por lo que posee un carácter supraindividual (que pre-existe al individuo). En cambio, la materia prima es incognoscible (porque no hay nada inteligible en ella) pero es lo que individualiza la forma/especie.


Potencia y acto, materia y forma son estructuras paralelas. La materia en efecto es o está en potencia pasiva dentro de la forma. Y la forma es lo que actualiza a la materia, la perfecciona y confiere al ser su potencia activa para obrar:
"La materia está en potencia porque tiende hacia la forma, y cuando está en acto es porque posee su forma (...) la forma es acto" (Aristóteles, Metafísica)
Esencia y existencia
El esencialismo asegura que la existencia es empírica y no permite conocer a los seres: es el dominio de lo accidental y lo contingente, de lo múltiple y de la alteridad irreductible. A la inversa, el existencialismo pone la esencia como el fruto no contingente de la existencia del sujeto. Para Heidegger, la esencia del hombre consiste en hacerse comprender como ser ahí, i.e. en tanto que existencia. En el primer caso, del cuál Descartes es un representante, la Abstracción esencial de la existencia da la esencia, e inversamente en el segundo, como para Sartre.
La existencia deriva del ser como uno de sus efectos.
Ser: perfección, base de todas las demás perfecciones.
El ser es la causa del ente


¿Cuál es la particularidad del pensamiento postmetafísico?


Con Descartes adviene la modernidad y con esta se inaugura un nuevo horizonte, el de la subjetividad. El yo pienso (ego cogito) se convierte en el primer principio indubitable de la nueva filosofía y a medida que el incipiente ideismo cartesiano avance hacia el idealismo en sus diversas formas, el mundo natural y Dios pasaran a ser merum cogitatum o meras cosas pensadas, y por lo mismo radicadas en el yo, nueva realidad radical. Dentro del nuevo pensamiento de la metafísica las cosas no son lo que de suyo son, sino lo que yo pienso que son. La metafísica dará una nueva teoría del conocimiento. La ontología, en este contexto no tratara del ser, sino de la idea de ser.


Al pensamiento de Descartes se sigue el pensamiento de Hegel sobre la ciencia de la lógica de Hegel. Pero la metafísica no podía seguir siendo del mundo de las abstracciones. Marx, Nietzcshe, Comte, fueron algunos de los filósofos entre los más reconocidos que declaraban la muerte real de la metafísica. Según, Germán Marquinez, la metafísica, en efecto, fue posible de nuevo en nuestro siglo en la medida en que se pretendió superar el horizonte de la modernidad e instaurar un nuevo horizonte, vagamente intuido por Henri Bergson y posteriormente por la fenomenología y el existencialismo y que podríamos sintetizar en el grito de E, Husserl: “ir a las cosas mismas”.


Sigue Marquinez, el nuevo horizonte que hoy alcanzamos a contemplar es el de la realidad alteridad. El realismo griego era fisicista, el nuevo realismo es humanista, más aun, personalista. En esta perspectiva Zubiri es quizás el más insistente.